Con más de 850 kilómetros de costa, Portugal es un país perfecto para la práctica del surf. Con viento favorable y sol a lo largo del año, pocas costas en el mundo ofrecen tantos lugares idóneos para coger olas a tan poca distancia los unos de los otros.

El océano choca contra la costa portuguesa y en el fondo marino de muchas playas se forman cañones de rocas, que incrementan el tamaño y la fuerza de las olas. Desde las gigantes más famosas, como las de Nazaré, buscadas por los surfistas más intrépidos como Garrett McNamara, hasta las aptas para todos los públicos y niveles, en Portugal es poco habitual que las condiciones del mar no acompañen para disfrutar no solo del surf, sino también de otras modalidades como el bodyboard, el windsurf, el kitesurf o el paddlesurf.

Oporto no es una excepción y a muy poca distancia del centro de la ciudad es posible encontrar playas en las que dar rienda suelta a la sed de olas. En Bluesock Hostels lo sabemos y por eso ofrecemos a nuestros huéspedes la oportunidad de iniciarse o perfeccionar sus habilidades sobre la tabla con jornadas de surf en Matosinhos, en colaboración con la escuela Onda Pura. Ya sea reservando nuestro Surf Camp o subiéndote al Surf Bus que sale periódicamente de nuestro hostel, no dejes pasar la oportunidad de aprovechar tu estancia en Oporto para disfrutar de las famosas olas portuguesas.